El agua es un recurso fundamental en la sostenibilidad de los edificios y juega un papel importante en la certificación VERDE. Esta certificación, desarrollada para promover prácticas de construcción sostenibles, reconoce y valora el uso eficiente del agua como uno de sus pilares principales.
Desde 2022, España se ha enfrentado a una de las sequías más severas en décadas. Numerosas regiones han sufrido restricciones de agua, afectando tanto a la agricultura como a la vida diaria de los ciudadanos. Esta situación destaca la urgente necesidad de implementar medidas de ahorro y gestión eficiente del agua en todos los sectores, incluida la construcción y el mantenimiento de edificios.
La gestión eficiente del agua en edificios sostenibles implica la adopción de diversas estrategias y tecnologías diseñadas para reducir el consumo y aprovechar al máximo los recursos hídricos disponibles. Estas prácticas no solo ayudan a mitigar los efectos de la sequía, sino que también contribuyen a obtener la certificación VERDE, demostrando el compromiso del edificio con la sostenibilidad ambiental.
La gestión sostenible del agua es uno de los pilares fundamentales en cualquier sistema de certificación. En nuestra labor como expertos, asesoramos a empresas y arquitectos en el desarrollo de estudios y diseños necesarios para lograr una gestión óptima del agua.
Un componente esencial de cualquier certificación es la sostenibilidad en el uso del agua. Dependiendo del tipo de edificio y el certificado correspondiente, los requisitos sobre el agua pueden variar. En el caso de la certificación VERDE para edificios residenciales, el uso sostenible del agua se evalúa dentro de la categoría de Recursos Naturales.
En la certificación VERDE Residencial, la categoría de Recursos Naturales representa el 26.39% del total de puntos. De este porcentaje, el 8.07% está directamente relacionado con el uso sostenible del agua. Los conceptos específicos y sus puntuaciones en esta categoría incluyen:
A diferencia de otros esquemas como LEED y BREEAM, el esquema VERDE no solo establece objetivos de reducción de consumo de agua, sino que también proporciona la metodología para su cálculo, facilitando el trabajo a los redactores del proyecto.
Implementar estrategias efectivas para el ahorro de agua es esencial para cumplir con los criterios de la certificación VERDE. A continuación, se presentan algunas de las tecnologías y prácticas más relevantes:
La gestión eficiente del agua es un componente esencial de la certificación VERDE y de la construcción sostenible en general. En un contexto de creciente escasez de agua y cambio climático, implementar estrategias de ahorro y reutilización del agua es más crucial que nunca. Adoptar estas prácticas no solo contribuye a la sostenibilidad ambiental, sino que también mejora la calidad de vida de los habitantes y asegura un uso responsable de los recursos hídricos. Adoptar la certificación VERDE y sus principios no solo es una necesidad ambiental, sino también una inversión en el futuro, asegurando edificios más sostenibles y resilientes frente a los desafíos del cambio climático y la escasez de agua.